Capítulo 1
Cuenta Paula....
Era un caluroso día de enero, hace menos
de un mes habíamos terminado el secundario, lo estaba calculando mientras me
preparaba a encontrarme con Julián (mi novio) mientras me vestía en mi cuarto
pensaba las cosas que habíamos vivido esos años felices de colegio, ¡cúantas amistades! ¡cúantos momentos divertidos
y no tanto! allí había conocido a Julián, mi primer amor, lo amaba con locura y
lo hice desde el primer momento q lo vi. Sus ojos celestes eran increíbles, su
tez blanca contrastando con su pelo negro era un combo imposible de pasar
inadvertido. ¡Más que al ver entrar a un chico nuevo y encontrarse a alguien
así! Recuerdo que todas mis compañeras fueron cual cuervos hacia él, menos yo
que esperé en mi lugar y opté por saber más de ese chico que subyugaba a todas.
Se integró rápido a un curso ya armado
de 4 º año. Desde ese entonces e increíblemente y sin proponérmelo nos
empezamos a conocer. Su trato hacia mí era distinto que con el resto de mis
compañeras (muy a pesar de ellas) cuando casi sin darnos cuenta pasábamos casi
todo el tiempo juntos. Primero me dediqué a conocerlo y que él me conozca a mí!
era increíble ver lo conectados que estábamos, nos gustaban las mismas cosas,
pensábamos parecido, no fue difícil imaginar que terminaríamos juntos! sólo era
cuestión de tiempo!
Si bien tuve que bancarme que más de una
se le acercara con dobles intenciones y algún que otro inoportuno que me tiró
onda también… el comienzo de nuestra relación fue soñada, ya no podíamos
esquivar más lo que nos pasaba y si bien ambos (sin consultárnoslo) se fue
metiendo en el corazón del otro, también temíamos que al ser “algo más que amigos”
termine con la relación que habíamos construido. Pero también sabíamos que
nuestros sentimientos no eran los de dos amigos, eso era obvio, los celos, la
sobreprotección y las peleas no opacaban todo lo que con mirarnos no hacía
falta explicar….
Y
así fue como 18 meses estamos de novios. Todavía lo recuerdo como si fuera
ayer! Habíamos salido a bailar con todos mis compañeros de curso. El bendito
4ºA! a pesar de q faltaba todavía un año para que nos egresemos parecía que los
festejos ya empezaban desde ese año, casí todos los fines de semana se
organizaban fiestas o salidas a boliche, ese finde no era la excepción! A pesar
que nos encontrásemos en el mes de Julio y el frío era polar esa noche ibas a
encontrarnos todos en el boliche de siempre!
Me encontraba bailando con mis amigas de curso
(como es de esperar los hombres bailaban por su lado, entre ellos Julián) y un
chico (muy lindo por cierto) me invitó a bailar. No veía por qué no aceptar la
propuesta (y si, también me gustaba un poco provocarlo) acepté y empezábamos a
movernos al ritmo de la música. En un momento el chico que decía llamarse
Matías empezó a hablarme al oído. ¡No había otra manera de comunicarse con el
volumen de la música! No pude entender bien pero pude suponer que me pedía un
beso. Lo miré y le dije que no pero el insistió y me tomó a la fuerza en ese
instante Julián estaba ahí separándonos
Paula:
¿qué hacés? ¡soltame nene!
Julián:
soltala estúpido, no escuchaste! – lo agarró de la espalda y lo alejó de mí- no
escuchaste que te dije que la sueltes!
Matías: y
vos ¿quién sos? ¿Por qué te metés?
Julián: ¡soy
su novio!¡ Cómo querés que no me meta!
Yo lo miré sorprendida pero en ningún
momento hice nada, supuse que sólo lo hacía para que me deje tranquila.
Matías:
no lo sabía… - se alejó sin decir más nada.
Julián: ¿Estás
bien? – mirándome como pidiéndome explicaciones.
Paula:
si, gracias – agaché mi mirada y cuando me dí vuelta para regresar con mi grupo
me agarró del brazo y me llevó afuera del boliche.
Una vez afuera y sin el barullo
ensordecedor del boliche. Me apoyó contra una de las paredes de la entrada y se
puso en frente mío y se dignó a hablarme:
Julián:
Ya no puedo más, ya no puedo seguir guardando esto que me pasa – mirándome fijo
a los ojos- desde el primer día que te vi no dejo de pensar en vos, me gustaste
desde ese entonces y hasta hoy que me animo a confesártelo. Yo sé que vos me
querés sólo como un amigo pero necesito serte sincero y dejar de mentirme y de
ocultártelo aunque ya no quieras saber más nada de mí –agachando la mirada q
hasta ese entonces sostenía.
Y si, me lo tiró así como si nada,
pensé que mis sentimientos hacia el eran obvios, pero se ve que no. Sentí que
mi corazón iba explotar de alegría. Me quedé sin poder decir nada. Yo y mi
maldita costumbre de quedarme petrificada ante las sorpresas. Y Vaya si era una
sorpresa! La que más estaba esperando! Y en lo que trataba de asimilar todo lo
que me había dicho lo veo alejarse…
Hola!!!Subo otro más, espero que les guste. La que quiera puede comentar!!! mi twitter es @LauyValenPyP yo soy Laura :)
No hay comentarios:
Publicar un comentario