sábado, 31 de agosto de 2013

Capítulo 66



Capítulo 66


    Marcelo terminó de presentar al jurado y comenzó a anunciarme a mí… mis piernas empezaron a temblar…


Pablo: ¡tranquila Pau! ¡la vamos a romper!-volvió a repetirme como queriendo convencerse a sí mismo.

Paula:¡ya no hay marcha atrás! –lo miré segura- ¡la vamos a romper!


Cuenta Pedro…


    Me despedí de mi novia para dirigirme al estudio. No podía creer que yo también esté tan nervioso, para colmo de males mi operativo para tratar de relajarla había fracasado. Paula no tomó en gracia mi broma y ahora estaba enojada, la entendía, ¡cómo se me ocurrió hacerle esto justo ahora! Solo espero que el enojo se le pase rápido, para nada quería arruinar este momento así, me equivoqué… cuando escuché detrás de la puerta del camarín lo mal que se había puesto me quería matar, busqué la mirada de mis amigos productores y los odie por haberme permitido hacerlo. ¿qué estaba pensando?

    Llegué al piso y visualicé a Zai y a Gege, me acerqué y las saludé. Apenas ingresé escuché los gritos de la tribuna, y sí, efectivamente, muchas de las chicas que siempre me acompañan estaban, esta vez, haciéndole el aguante a mi novia. Sonreí y levanté mi mano para saludarlas. Llevaban varios carteles con el nombre de Paula y otros con fotos, la tribuna estaba repleta, ¡cúantos recuerdos! Recordaba mis nervios el año pasado el primer día que bailé, todos los sentimientos encontrados que tenía ese día y esperaba que remotamente Pau pueda disfrutar todo así como lo hice yo…


    Marcelo terminó de presentar al jurado y comenzó a anunciar a Paula, cuando me vio parado al costado lo veo acercarse a mi…


Marcelo: ¡Acá está su novio! –me acercaron un micrófono y yo lo tomé dudando.

Pedro: ¡hola Marcelo!-lo saludé tímido, como siempre, nunca me olvidaba que era mi jefe y le agradecía el lugar que me dio y el cuidado que tuvo siempre conmigo…

Marcelo:¡Hola! ¡qué bueno que esté acá acompañando a su novia! ¡lo felicito por “Buenos…” mis hijos son fanáticos del programa-me dijo animado, y a mí me costaba poner mi cabeza en una charla…

Pedro: ¡gracias!-le dije como queriendo terminar la charla ahí, pero sus intenciones no eran las mismas...

Marcelo: lo noto nervioso ¿o me parece?-y creo que por más que lo niegue era más que evidente…

Pedro: Sí, estoy un poco nervioso-le confesé tímido.

Marcelo: ¡pero si usted no baila! ¡tiene que transmitirle seguridad a su novia! –me reclamó medio en chiste y medio en serio.

Pedro: Sí, pero creo que no soy bueno para eso…

Marcelo: ¿por qué?-me preguntó divertido, abriendo la charla…

Pedro: no, por nada, traté de relajarla…

Marcelo: bueno, bueno qué hizo para tratar de relajarla? –ante las risas de los presentes, cuando caí que se había malinterpretado lo que dije…

Pedro: no, no piensen mal-la quise arreglar- le hice una broma antes de salir…-cuando estaba por contarle me interrumpió…

Marcelo: ¿qué broma? Espere que quiero que me lo cuente ella con usted acá presente-me dijo mientras se alejaba volviendo al centro del estudio, ¡en donde nos metí!


Cuenta Paula…


     ¡No podía creer lo que estaba viendo en el monitor! Verlo a Pedro hablar tan nervioso me llenó de ternura, pero ¡qué necesidad tenía de contar lo de la broma! Listo, ahora me tocaba entrar a mí e iba a preguntarme cómo fue ¡genial! ¡Yo que solo quería entrar, bailar, que me den el puntaje e irme!

     Me agarré fuerte de la mano de Pablo cuando escucho que vuelve a anunciarme…


Marcelo: están representando al hospital de Necochea, para mejorar y ampliar el sector de pediatría, su bailarín el señor Pablo Juín y la señorita Paula Chaves…


     Las puertas se abrieron y miré hacia el frente, miles de flashes disparaban y yo solo me preguntaba ¿qué hacía ahí? La tribuna estaba llena de gente con carteles con mi nombre y hasta con fotos, me arengaban y tenía la necesidad de salir corriendo… Creo que Pablo percibió mi intención y me apretó la mano fuerte impulsándola hacía adelante, debíamos bajar las escaleras y caminar los pasos para llegar al centro del estudio. Eso hice, di mis pasos tambaleantes junto a él, parecía un perrito llevado con la correa tras su dueño. Miré a un costado y las vi a Zai y a Gege que me saludaban, también estaban mis representantes, pero mi vista buscaba un blanco obvio, Pedro… lo vi, más atrás desde donde estaba hablando antes y me sentí aliviada.

    Llegamos al centro del estudio y Marcelo me dio la bienvenida. Me preguntó cómo me sentía, cómo me iba con los ensayos, con el equipo que habíamos formado, entre otras cosas cuando me empieza a preguntar sobre Pedro…


Marcelo: ¡acá esta su novio!-yo giré mi cabeza hacia donde señalaba la mano del conductor para encontrarme con la mirada de Pedro…- me dijo que le hizo una broma antes del debut y quería que me la cuente usted…


    Dudé un poco, pero finalmente le conté la genial idea que tuvo mi novio, todos se reían al ver la cara de Pedro mientras yo lo contaba.


Marcelo: ¡pero usted es un desastre! –dirigiéndose a Pedro que parecía querer salir corriendo del estudio, que la tierra lo tragase…

Pedro: si, ¡ya sé! ¡Me equivoqué! –dijo levantando sus hombros como si fuese un nene al que los papas están retando…

Marcelo: ya le pidió perdón-y él respondió asintiendo con la cabeza- y lo perdonó- esta vez hizo el gesto contrario y yo morí de amor, Marcelo volvió su mirada ante mí…

Paula: no se la voy a hacer tan fácil-dije divertida, Marcelo volvió su mirada a Pedro que me observaba atento como queriendo descifrar lo que pensaba, creo que a esta altura ya se había dado cuenta que mi enojo solo era un juego…

Pedro: si te canto, ¿me perdonás? –yo reí ante la propuesta de mi novio y Marcelo empezó a festejar la idea, pidiendo una pista de un tema romántico-¿Montaner?-yo sonreí sin responder nada ¿qué es toda esta locura? Yo seguía parada en el centro del estudio junto a Pablo, unos metros al costado estaba él con Marcelo que le hacía señas de que se acerque, cosa que dudó y al final aceptó, se empezó a escuchar en el estudio la pista de un tema de Montaner…

    Con el micrófono en mano y nervioso como pocas veces lo vi, se empezó a acercar hasta mí cuando empezó a entonar la primera estrofa…



Quizás te puedas preguntar

Qué le hace falta a esta noche blanca,

A nuestras vidas que ya han vivido tanto…

Que han visto mil colores de sábanas de seda.


    Se paró al lado mío y buscó mi mano y yo sentía que me estaba derritiendo de amor ¿desentonaba? ¡No lo sé! Yo solo podía ver al hombre más tierno del mundo haciendo algo que no sabe hacer solo por buscar el perdón de su novia… toda la tribuna y los presentes se movían al compás de la música acompañando en la misión a Pedro que siguió cantando…


Y cuando llueve, te gusta caminar

Vas abrazándome, sin prisa aunque te mojes

Amor mío, lo nuestro es como es

Es todo una aventura, no le hace falta nada


    Buscó mi mirada para que pueda acompañarlo, me agarraba fuerte de la mano y yo solo sonreía esperando que termine su show…


Y estoy aquí, tan enamorado de ti

Que la noche dura un poco más

El grito de una ciudad

Que ve nuestras caras la humedad

Y te hare compañía más allá de la vida

Yo te juro que arriba te amare más

Tan enamorados y así

La noche dura un poco más…


    Todo el estudio estalló en aplausos y él hacia ademanes en agradecimiento, hasta que volvió a fijar su atención en mí…



Pedro: ¿me perdonás?-me dijo bajito sin que nadie lo percibiera y yo ya no aguanté más... lo tomé de la cara suavemente y lo besé, ahí en el medio del estudio, sin importarme nada más…




   Hola!!!! Cómo andan??? Yo bien!!! ¿y? les gustó recordar un poco? Justo en estos días con todo lo que acontece estaba pensando ¡qué distinto hubiese sido todo si estuviera LCDS, EEES y el Bailando! ¿no? Hubiésemos vivido todo un poquito más de cerca, no? Pero se dio así, en esta guerra de figuras y canales! Pero lo importante es que ellos estén bien y ya con Oli en casa!

   Bueno, espero que les haya gustado y ya saben que pueden dejar sus comentarios! Les aclaro que hasta el martes no voy a poder subir, no tengo casi nada escrito y no podré hacerlo hasta ese día! Finde a full, con mi marido en casa, mis nenas ¡imposible sentarme a escribir!

    Les dejo el adelanto para ese día ;)





    Marcelo empezó a hacer las publicidades previas a mi baile, momento en el cual mi bailarín y yo nos acomodamos en nuestro puesto, trataba de recordar cada paso pero mi mente estaba en blanco ¡por Dios! ¿lo olvidé todo?

jueves, 29 de agosto de 2013

Capítulo 65

Capítulo 65



“¡Mucha Suerte mi Amor! ¡Vas a brillar!

Te pido disculpas, pero se me complicó todo, no voy a poder estar ahí con vos. ¡Juro que hice todo lo posible! La próxima te prometo que estoy ahí.

Vos tranquila ¡la vas a romper!

           
                               Te amo, Pedro




    Terminé de leer la nota y me quedé paralizada, sin poder creerlo ¿no iba a venir? Mis lágrimas empezaron a salir junto con el sentimiento de enojo, tristeza y decepción…


Sochi: ¡tranquila Pau! No llores- mientras yo me tapaba la cara con las manos descargando toda mi angustia- ¡habrá hecho todo lo posible por venir! Algo le habrá pasado…

Paula: ¡no Sochi! –mientras la miraba a mí amiga-Me lo prometió, me dijo que iba a estar acá conmigo, tenía que estar acá, acompañándome…

Sochi: pero Pau, no te pongas así…

Paula: ¿y cómo querés que me ponga? Sabía lo nerviosa que estaba, me dijo que iba a estar acá conmigo, se hizo todo para que él pueda estar y me manda estas flores… -mientras las agarraba y las tiraba a un costado, no quería ni verlas.


     Me dediqué a descargar mi llanto apoyando mi cabeza entre mis piernas, que las tenía levantadas en la silla donde estaba sentada cuando escucho que entra alguien sin golpear la puerta ¡qué desubicado! Yo ni miré quién era, traté de calmarme, cuando siento que alguien me toca el hombro…


XXX: ¡hola! –escucho decir y me di vuelta rápido sin poder creer lo que oía.

Paula: ¿qué hacés acá? –le pregunté entre sorprendida y enojada.

Pedro: ¿de verdad pensaste que te iba a fallar? –mis lágrimas que antes eran de enojo ahora eran de felicidad por verlo…me abrazó y me llenó de besos, me quedé quieta hasta que reaccioné…

Paula: no entiendo ¿y las flores? ¿la nota?

Pedro: era una bromita –mientras se rascaba la sien- para que te olvides un ratito del baile… de tus nervios… ¿para distenderte? –me dijo sonriendo…

Paula: ¿vos me estar cargando? ¡sos un cínico! ¿no se te ocurrió otra manera para distenderme? yo tendría que matarte nene… -le dije tratando parecer enojada, pero a esta altura lo único que me importaba es que estaba ahí, conmigo… él me miraba asustado...

Pedro: me equivoqué ¿me perdonás? ¡perdón! perdón!-mientras buscaba mis labios, yo lo esquivaba…

Paula: ¿sabés todo lo que vas a tener que hacer para que te perdone? – obviamente no estaba enojada de enserio pero si a él le gustaba jugar y hacer maldades, me iba a conocer…


    En eso escuchamos golpear la puerta, fue cuando me percaté que mi amiga nos había dejado solos, tal vez era ella que había regresado… pero no, era Mariano con un productor que nos preguntaban si podían grabar un back antes de bailar, lo que tanto Pedro como yo estuvimos de acuerdo.

    Grabamos un par de cosas, le conté a Mariano la maldad que me había hecho Pedro y jugamos un poco con eso, mientras mi novio contaba cómo se le ocurrió la idea ¡como si se tratase de una gran hazaña! Divertidos y entretenidos los minutos pasaban junto con la llegada del comienzo del programa, Mariano, el productor y el camarógrafo nos dejaron para que puedan terminar de prepararme.

   Pedro no se separó de mi lado un segundo, aunque yo seguía haciéndole creer que estaba enojada… Estaba en todos los detalles, cuidándome, hasta me ayudó a pasarme las cremas que dan color, como si estuviera bronceada, cosa imposible a fines de mayo.


Paula: ¿listo Pedro?-marcando distancia llamándolo por el nombre, mientras lo veía concentrado pasarme crema por los brazos, si no estuviésemos rodeados de gente éste sería un momento erótico, tal vez él pensaba lo mismo…

Pedro: sonrió- me podría dedicar a esto, quedaste genial, no podés estar más hermosa- se acercó para darme un beso y yo volví a esquivarlo…

Paula: ¡no pienses que endulzándome los oídos me vas a comprar! –le dije seria, tratando de contener mis ganas de llenarlo de besos, pero se la iba a hacer pagar…él me miró triste.

Pedro: ¿en serio te enojaste?-me preguntó con cara de perrito mojado y antes de ceder me levanté a hablar con las chicas y Sochi que estaban acomodando las cosas después de haber terminado su trabajo, lo vi quedarse sentado pensativo, seguro estaba recalculando, pensando en que cometió un error y me dio un poco de pena, pero lo iba a hacer sufrir un poquito…


    En eso escuchamos que golpean la puerta eran Vanesa toda producida recién llegada de su casa con Pablo ya listo en composé conmigo…


Vanesa: ¿lista Pau? ¡estás hermosa! Dicen que ya tenemos que ir yendo-y mis nervios volvieron a aparecer, giré mi cabeza para mirarlo a Pedro que me hizo señas de que estaba todo bien.

Pablo: ¡vamos Pau! Sale genial, la vamos a romper-y ojalá yo estuviese tan segura…

Paula: bueno, vamos…-dije visiblemente afectada…


   Salimos los 3 juntos con Pedro que iba atrás nuestro siguiendo nuestros pasos, me detuve dejándole distancia a mis compañeros y lo esperé…él me sonrió…


Pedro: ¡tranquila! Va a salir todo bien- yo confié en él, lo necesitaba…

Paula: ¿dónde vas a estar?-quería verlo, saber que estaba ahí…

Pedro: me voy a poner al costado, Zai me mandó un mensaje, ella y Gege ya están en el piso, me voy con ellas…-mientras me acompañaba, me tranquilizaba saber que las chicas estaban apoyándome también-hasta acá te acompaño- mientras veíamos que Marcelo entraba al estudio y daba comienzo al programa.


    Fue conmigo hasta atrás de las pantallas que funcionaban de portal de entrada. Mariano andaba dando vueltas y capturó con su cámara mi momento de tensión. Mi couch se despidió deseándonos suerte, ella tenía que estar en el piso también… Pedro volvió a hablarme…


Pedro: Bueno amor, ya te van a anunciar…-se paró delante de mí tomándome de los brazos, haciendo que fije toda mi atención en él-¡salí y brillá! Yo estoy acá, con vos… -no sé por qué de mis ojos las lágrimas hacían fuerza por salir-aunque estés enojada…

Paula:¡gracias!-lo interrumpí con un hilo de voz…

Pedro: ¿por qué?-me dijo tomándome la cara suavemente con sus manos y mirándome fijo…

Paula: por estar conmigo-suspiró y buscó con sus labios los míos, esta vez lo necesitaba y me olvidé del enojo fingido y me dejé besar. Pero apenas se unieron nuestros labios se vieron obligados a separarse ante la insistente llamada de los productores para que nos acercásemos con Pablo detrás de la pantalla, bailaríamos primero, como nos habían dicho.


   Lo miré a Pedro y él volvió a besarme rápidamente despidiéndose de mí. Lo vi alejarse y volviendo a mirar hacia atrás para darme su última mirada de apoyo y me acerqué a Pablo que ya estaba parado donde nos estaban indicando. Mariano seguía con su cámara cubriendo todo el back. Al costado de donde estábamos parados había un monitor en donde se veía el vivo del programa. Un productor estaba con nosotros, asistiéndonos, conteniéndonos. Pablo también estaba nervioso y eso que ya tenía experiencia en el certamen, no era su primer bailando.

   Marcelo terminó de presentar al jurado y comenzó a anunciarme a mí… mis piernas empezaron a temblar…


Pablo: ¡tranquila Pau! ¡la vamos a romper!-volvió a repetirme como queriendo convencerse a sí mismo.

Paula:¡ya no hay marcha atrás! –lo miré segura- ¡la vamos a romper!



   Holaaaa!!! Cómo andan!!! No saben lo que me cuesta escribir esto!!! En la que me metí!!! Pero la novela no se basa en el certamen, solo esta vez porque es el debut y en algún que otro, pero me pareció divertido recordar un poquito y ponerlos en esos lugares de nuevo!!!

   Ya saben que pueden dejar sus comentarios y a la que quiera que le avise cada vez que suba mi twitter es @LauyValenPyP pueden dejar sus comentarios ahí también las que no puedan por acá…

   Les dejo un adelanto para el día sábado!!!



    No podía creer lo que estaba viendo en el monitor! Verlo a Pedro hablar tan nervioso me llenó de ternura, pero ¡qué necesidad tenía de contar lo de la broma! Listo, ahora me tocaba entrar a mí e iba a preguntarme cómo fue ¡genial! ¡Yo que solo quería entrar, bailar, que me den el puntaje e irme! 

martes, 27 de agosto de 2013

Capítulo 64



Capítulo 64



Cuenta Pedro…


    Viernes, feriado de 25 de mayo. La había alcanzado a Pau hasta su ex departamento donde se juntarían con Zai y obviamente Gege y yo me iba a jugar al futbol, a pesar de que mi traumatólogo me lo había prohibido, y ante la negativa de mi novia, hacía mucho que no jugaba y no pude decir que no cuando me dijeron para ir, moría de ganas por hacerlo, la abstinencia era insoportable, necesitaba jugar aunque sea unos minutos…

    Esta semana empezó mucho mejor que la anterior, con Pau nos vamos adaptando a la convivencia, mejor dicho yo me estoy acostumbrando a convivir. Ella no tiene paz, hace mil cosas al mismo tiempo y es imposible seguirle el ritmo, y no pierde oportunidad para hacérmelo ver… en eso me hacía acordar a mi mamá que andaba atrás de todos nosotros, de mi papá, de los familiares, se ocupaba de la casa y de sus cosas, nunca se quedaba quieta. Amaba eso de Pau tanto como ella debe odiar mi tranquilidad para hacer todo, pero tratamos de complementarnos, de encontrarle la vuelta y cuando la veo demasiado acelerada trato de que baje un cambio, así como ella me hace reaccionar cuando yo me quedo.

   Hoy, se puede decir, que estamos perfecto, ya pasó la tormenta que tuvimos que afrontar días atrás. Julián, gracias a Dios, no había dado señales de vida. De a poco íbamos volviendo a nuestro ritmo normal, aunque confieso que sigo pendiente de Pau, la llamo todo el tiempo, creo que ella ya se acostumbró a eso. Y como ahora, siempre que podía la llevaba a todos lados.


Cuenta Paula…


    Entré al edificio y sentí un poco de nostalgia… no pasé mucho tiempo acá pero no podía evitar recordar todos los momentos lindos que pasé en él… golpeé la puerta y me abrieron mis amigas, sí, Zai ya había llegado. Nos sentamos y empezamos a hablar de todo y de todos, a veces ya ni sabíamos de quién hablábamos, mezclábamos todos los temas, amaba poder tener aunque sea una vez a la semana un tiempito con ellas. Con Gege, muy amiga de Zai nos entendimos por arte de magia, las tres congeniamos excelentemente bien, también con Sochi que esta vez no podía venir porque tenía reunión familiar, era la única de nosotras que estaba casada y también tenía una nena.


Gege: ¿y Pau? ¿supiste algo de Julián?-cambió rotundamente de tema mi amiga…

Paula: por suerte no, no volvió a aparecer…-le respondí tranquila…

Zaira: ¿y con Pedro? Andaba re bajón la semana pasada, ¿cómo está ahora?

Paula: mejor, más tranquilo. De a poco vamos acomodándonos. Fue difícil lo que pasó pero trato de hacer como que no ocurrió, quiero pensar que no va a volver a pasar…

Zaira: yo todavía no entiendo por qué no quisiste hacer la denuncia –me tiró sin filtro mi amiga, cuando le conté fue lo primero que me dijo…

Paula: ya te dije Zai, yo creo que realmente estaba arrepentido, que no se dio cuenta lo que estaba haciendo, no quiero empeorar las cosas, hacer la denuncia era estar removiendo todo de nuevo, yo confío que no va a volver a intentarlo…

Gege: perdón Pau ¿cómo podés confiar en alguién que hizo eso? –y era claro que no iba a poder justificarme…

Paula: no sé, tal vez por lo que fue, por lo que fuimos, por cómo se dieron las cosas, creo que hasta llegué a sentirme culpable de lo que pasó, al dejarlo así, al haberme enamorado de Pedro aun siendo su novia, reconozco que yo no estuve bien, y vos sabés Zai –mirando a mi amiga, ella asintiendo- lo difícil que fue para mí reconocer lo que me pasaba con Pedro, y también asumir que se había acabado todo con Julián.

Zai: Sí, pero eso no justifica que haya hecho lo que hizo, en eso le doy toda la razón a Pedro, la denuncia la tendrías que haber hecho, por lo menos para advertirle que no puede hacer lo que quiera.

Paula: Sí, lo sé, creo que hice mal, pero en ese momento no lo podía ver así. Por suerte todo está mejor entre nosotros.

Gege: ¿y la convivencia? ¡espero que bien! –reímos las tres

Paula: mejor de lo que pensaba, creo que de a poco le vamos encontrándola vuelta, no les niego que extraño mi independencia pero más lo amo a él, nos estamos adaptando. Ayer mismo compré unas cortinas para el baño y cambié las que tenía, también unas para el balcón, de a poco la voy acondicionando…

Zaira: jajaja ah! Bueno ¡estás instaladísima! ¿y Pedro qué dice?-me preguntó con una sonrisa de oreja a oreja.

Paula: me dijo que es mi casa que no le pregunte nada que haga lo que quiera, que confía en mí-mientras les guiñaba el ojo a mis amigas.

Gege: listo, ya no te puede reclamar nada- retrucó mi amiga.

Zai: ¡listo! ¡Ya es tu casa! –y festejamos las tres.


    Era así, siempre soñé que el día en que conviviría con alguien iba a ser de otra manera, pero se dio así, y ahora no me veo en otro lugar si no es con Pedro, en realidad, o en su casa o en la mía, ya estábamos semi-conviviendo solo que ahora era definitivo. Sabía que íbamos a tropezar muchas veces, que teníamos mucho para aprender, pero también sé que lo amo con toda mi alma y que no hay nada que no podamos superar…


Día martes, debut de Pau...


    Ya me desperté totalmente alterada, con resfrío y dolor de cabeza, somatizando todo como era costumbre en mí. Desayunamos juntos con Pedro y él partió hacia Polka con la promesa de llegar para acompañarme hoy, en el día de mí debut. Amaba que esté así conmigo, conteniendo mis brotes de nervios y mi hiperactividad, él era el único que encontraba las palabras justas siempre, no sé cómo hacía pero estando con él yo me sentía en paz. Apenas salió y los nervios se apoderaron de mí, Repasaba una y mil veces la coreografía en la cabeza y los reproducía en mi cuerpo. Teníamos el último ensayo con Vanesa y Pablo después del mediodía y desde ahí ya me quedaba en el canal para los ensayos de piso y la última prueba de vestuario y maquillaje. Ya sentía Ideas como mi casa, tal vez porque todos conocían a Pedro, pero realmente me hacían sentir muy bien, me sacaba tensión.


-------------------------

    Terminamos los ensayos de piso, todo salía genial, solo esperaba que salga así en el vivo, tenía terror de bloquearme, de que los trucos no salieran como lo habíamos ensayado, de equivocarme… Me fui hasta camarines para empezar a prepararme, estaba con Sochi que era quién iba a asistirme e iba a trabajar en conjunto con las chicas de Ideas.

   Miré mi reloj y me empecé a poner nerviosa, solo faltaba 1 hora y media para que empiece el programa, y lo peor es que Pedro no había dado señales de vida. La última vez que me llamó yo estaba en pleno ensayo y hablamos muy poco.

    En eso escucho que golpean la puerta de mi camarín y me di vuelta esperando verlo a él, pero era un productor que me venía a traer un hermoso ramo de rosas, Sochi las recibió por mí ya que yo estaba sentada y ella estaba cerca de la puerta y me las alcanzó.


Sochi: ¡son hermosas Pau! –mientras chusmeaba el remitente- son de Pedro me dijo seria mientras me entregaba el ramo…


Agarré el ramo y busqué la nota que traía… no lo podía creer…



“¡Mucha Suerte mi Amor! ¡Vas a brillar!

Te pido disculpas, pero se me complicó todo, no voy a poder estar ahí con vos. ¡Juro que hice todo lo posible! La próxima te prometo que estoy ahí.

Vos tranquila ¡la vas a romper!


                                Te amo, Pedro



     Terminé de leer la nota y me quedé paralizada, sin poder creerlo ¿no iba a venir? Mis lágrimas empezaron a salir junto con el sentimiento de enojo, tristeza y decepción...




   Hola!!! cómo andan??? y un día volví!!! anda bastante colgada chicas!!! otra vez estoy subiendo sin revisar!!! espero tener más tiempo estos días!!! 

    Y se viene el debut de Pau en el Bailando!!! Y Pedro no va a estar??? vamos a ver qué pasa!!!


    Les dejo el adelanto para el próximo que subiré el jueves ;)




Sochi: pero Pau, no te pongas así…

Paula: ¿y cómo querés que me ponga? Sabía lo nerviosa que estaba, me dijo que iba a estar acá conmigo, se hizo todo para que él pueda estar y me manda estas flores… -mientras las agarraba y las tiraba a un costado, no quería ni verlas.

sábado, 24 de agosto de 2013

Capítulo 63



Capítulo 63



Cuenta Pedro…



    Ya estábamos acá, en mi casa, pero me sentía como si estuviera caminando sobre una cuerda floja todo el tiempo, tratando de no caer, de no caernos. No había manera de que nos entendiéramos, y no fue la excepción cuando salí del baño a querer disculparme por sentir que la había obligado a venir a vivir conmigo, ya que no notaba del todo segura… otra vez pelea, otra vez su enojo, otra vez queriendo entenderla. Otra vez sintiendo que hago todo mal, que quiero avanzar un paso y retrocedemos 3…

     Después de que Paula se quemó y que yo la curé pudimos hablar más tranquilos, bajamos los decibeles. Me confesó que mis excesos de cuidados era algo a lo que a ella le costaba acostumbrarse, que siempre estuvo sola, sin nadie que esté al pendiente de ella, que siempre se las arregló sola y empecé a entender el porqué de sus reacciones… Necesitaba procesar tantos cambios… somos una pareja, la soledad ya no forma parte de su vida y yo estaba dispuesto a cuidarla, acompañarla y a amarla…



     Comenzamos a besarnos y sentí en sus besos la intención de ir por más, no sabía qué hacer… la sentí desprender los botones de mi camisa y me quedé paralizado por unos segundos. No quería arruinarlo todo avanzando para que luego ella vuelva a frenarme… Pero sus intenciones eran claras….Sus besos apasionados empezaron a activar mis sentidos… me dejé llevar, dejé de reprimirme, la necesitaba… necesitaba sentirla mía de nuevo… le saqué la remera que llevaba puesta mientras ella me terminaba de sacar la camisa, la apoyé contra la mesada y busqué su mirada, en la que volvimos a encontrarnos, a entendernos, los dos queríamos lo mismo… me dediqué a recorrer su cuerpo con besos mientras nos deshacíamos de las últimas prendas que llevábamos, ya desnudos la levanté para sentarla en la mesada fría de mármol… no era la forma ni el lugar más cómodo pero eso no importaba… volvimos a ser uno… a amarnos con pasión…



Cuenta Paula…



     Caímos rendidos en el suelo de la cocina, después de amarnos con locura, con pasión. No tenía idea de cuanto lo extrañaba, lo necesitaba, creo que él tampoco…



Pedro: ¡inauguramos la cocina! ¡bienvenida! –y yo reí ante el comentario desubicado y poco romántico de mi novio…

Paula: ¡sos un tarado! –lo besé- igual era eso lo que quería escuchar, que me des la bienvenida…



    Nos besamos con todo el amor que podíamos demostrarnos. Tratando de dejar atrás la tormenta… volver a encontrar el rumbo. A barajar y dar de nuevo. Necesitaba que sea así tanto como él… podía sentirlo en sus besos, que volvieron a ser los mismos de antes y hasta ahora pude darme cuenta que lo extrañaba tanto… esa barrera que había entre nosotros había desaparecido, y aunque era invisible se podía hasta palpar, y era lo que más me angustiaba. Podía estar peleada con el mundo, pero estar mal con Pedro alteraba todos mis sentidos, me bloqueaba.

    Necesitaba creer que podíamos superarlo todo, que no apostaríamos nuestro amor ante el orgullo… que no jugaríamos nuestra felicidad ante los miedos…


2 semanas después…



    Semana de debut. Hoy ya martes, el lunes fue el debut de la comedia de Pedro, “Buenos pero complicados” cosa que nos tenía muy ansiosos, por suerte les fue genial, con muy buena aceptación del público y excelentes críticas. Era la primera vez que Pedro actuaba, había hecho participaciones muy chicas en algún que otro programa de Ideas pero era la primera vez para él, encima con un protagónico. Por suerte él se sentía conforme con el resultado y estaba totalmente adaptado a la productora, el hecho de haber congeniado increíblemente con sus compañeros le facilitaban un montón las cosas… estaba feliz de hacer lo que le gustaba y aun así no haber perdido la relación con IDS ya que seguía firme en LCDS y en cuanto podía trataba de estar presente, tanto como que hoy, que es el debut del Bailando por un Sueño se había ido de grabar directamente allá para cubrirlo junto con Mariano, como lo había hecho los últimos años.

    Yo, obviamente estaba invitada como participante pero estaba demolida con tanto trabajo y preferí verlo tranquila desde casa. Hoy solo harían la apertura del ciclo y si había tiempo bailarían las primeras parejas. Yo recién bailaría en el vivo del martes, según me dijo la producción, más que nada para que Pedro pueda acompañarme, ya que en los grabados de los miércoles que se pasaban los jueves y viernes, Pedro estaría en plena grabación, y yo quería que él esté presente, y obviamente, ellos también.

    Y ya estaba nerviosa, estaba conforme con nuestro baile, debutábamos con el Disco. Con Pablo (mi bailarín) y Vanesa (mi couch) habíamos formado un buen equipo y nos entendíamos muy bien, estaba confiada que todo saldría bien pero la ansiedad y los nervios no se me iban con nada…



   Por suerte con Pedro pudimos arreglar para que desde la semana del 17 al 22 de Junio nos liberen ya que debíamos viajar para el casamiento de Juampi con Cami. Eso también nos tenía ansiosos, otra vez estaríamos juntos allá, amaba que pudiésemos recorrer esos lugares con Pedro de nuevo.

    La convivencia se nos estaba dando bastante bien, algún que otro cruce de vez en cuando, mi novio es demasiado relajado en todo y eso a mí me alteraba un poco, pero nos estamos adaptando y a pesar de tener poco tiempo para compartir juntos (ya que trabajamos full time) los momentos que estamos juntos tratamos de que sean en paz y armonía.

    El tema de Julián había pasado a ser tabú entre nosotros, ya no se tocaba más el tema y de a poco Pedro se fue distendiendo lo que me permitió relajarme a mí también, yo en particular, no supe nada más de él. Aunque no fue fácil de superar, a veces sentía que lo veía entre la gente, me sentía perseguida pero me di cuenta que solo era sugestión.

    Tenía mi cabeza en mil cosas, la convivencia repentina, nuestros debuts, los otros trabajos paralelos al certamen, el viaje, sin olvidar que yo iba a ser la madrina del Civil para lo cual ni siquiera había visto qué ponerme. Aparentemente y si no era eliminada en el primer ritmo… bailaría el segundo que es pop latino y después viajaríamos, así que no necesitaría reemplazo porque se baila cada 2 semanas, por la cantidad de participantes.



    Me improvisé una cena, ya que Pedro iba a ir a cenar con todo el equipo de Ideas después del debut, no regresaría hasta tarde. Me senté en el sillón para mirar el programa…



----------------

   La escenografía imponente, el estudio enorme, con más de 300 bailarines en el piso montando distintas coreografías, un espectáculo visualmente impresionante, digno de las Vegas. En un momento me arrepentí de no haber estado ahí, pero pensé que tal vez no iba a apreciar las cosas como lo hacía a través de la pantalla, el piso debe estar repleto de gente, entre productores e invitados.



   Se abrió la pantalla y salió Marcelo rodeado de su gente, elegante y carismático, dando comienzo al gran show y el solo hecho de pensar que en unos días más yo pisaría esa pista quería que la tierra me tragase. Atrás de él había más de una decena de bailarinas entre las cuales pude reconocer a la que bailaba con Pedro el año pasado, ¡qué bueno que allá conseguido ser parte del staff!

    Después de terminado el programa me fui a descansar, Pedro no regresaría antes de la 1 o 2 de la madrugada, y debía levantarse temprano para ir a grabar. No tenía sentido esperarlo despierta.

--------------

    A la 1 y media me desperté al escucharlo llegar…


Pedro: ¡hola amor! ¡te desperté! ¡Perdón! - mientras se acercaba a nuestra cama para saludarme con un beso

Paula: ¡sí, gordo pero todo bien! ¿cómo te fue? – mientras él se desvestía para meterse en la cama.

Pedro: ¡Genial! ¡extrañaba toda esa locura! –me dijo divertido- estuvimos con Mariano por todos lados cubriendo y haciendo notas para LCDS y para EEES.

Paula: ¡me imagino! Con Mariano es imposible que sea de otra forma- él asintió sonriendo.

Pedro: ¿cómo se vio? –mientras lo veía acomodar su ropa (obviamente a su manera)

Paula: Se vio increíble todo, me da más nervios ahora al saber que voy a estar pisando esa pista- le confesé…

Pedro: ¡tranquila amor! Es una experiencia única, no te vas a arrepentir…

Paula: ah! La vi a la que era tu bailarina el año pasado ¿Julieta, no? – él solo asintió- ¿qué bueno que esté en el staff! ¿no?

Pedro: sí- me dijo seco y lo vi irse al baño, tal vez no le gustaba mucho que le haya hablado de ella, tal vez no habían terminado bien, había escuchado hablar que no siempre los equipos congeniaban bien y tal vez ese había sido el caso de ellos. A los pocos minutos mi novio salió del baño y nos dispusimos a descansar, esta vez, juntos…


    Holaaaa!!!! Cómo están??? Todas revolucionadas!!! Por fin llegó Oli!!! Cuanta alegría!!! Ayer era un caos la daban por nacida como una hora antes!!! Por suerte salió todo bien :)


    Bueno a lo mío, éste capítulo es como ir mostrando el panorama, ya comenzó el programa de Pedro y está arrancando el Bailando. Muchos nervios, mucha ansiedad!

    Ya saben que la quiera puede comentar y la que quiera que le avise cuando suba mi twitter es @LauyValenPyP. Subí sin revisar y ando un poco dispersa, disculpen! ;)

    Les dejo el adelanto para el lunes o martes!




    Ya me desperté totalmente alterada, con resfrío y dolor de cabeza, somatizando todo como era costumbre en mí. Desayunamos juntos con Pedro y él partió hacia Polka con la promesa de llegar para acompañarme hoy, en el día de mí debut.

jueves, 22 de agosto de 2013

Capítulo 62



Capítulo 62



Paula: yo no tengo nada que perdonarte ¿por qué me pedís perdón? –le pregunté sincera, mientras ponía la última tanda de milanesas, ambos tuvimos una semana complicada, lo entendía…

Pedro: es que todo se dio así, me hubiera gustado que sea de otra manera –lo miré confundida- siento que vos no querés estar acá, que te obligué a que vengas a vivir conmigo… -me dijo serio, recriminándome, sentí un calor recorrerme por completo…

Paula: ¿vos me hablás en serio? ¡Vos sabés por qué estoy acá! –mis lágrimas aparecieron junto a un enojo que no podía justificar, tenía razón, yo hubiese preferido que sea distinto pero había aceptado que era lo mejor que podíamos hacer para estar más tranquilos…

Pedro: no te enojes, yo te entiendo… -trató de arreglarla intentando abrazarme cosa que no dejé que hiciera...  seguía de espaldas a él tratando de concentrarme en la cocina…

Paula: ¡no me digas que me entendés! Es mentira, nunca me entendiste, no hacés más que cuestionarme todo, no te pusiste un segundo en mi lugar solo buscaste estar vos seguro –no sabía lo que decía pero mi enojo hacía que no pudiera medir las palabras…-te ocupaste de tener todo controlado, que no me pase nada, pero nunca te ocupaste de entender lo que me pasaba a mí-le reproché y lo vi agachar su cabeza abatido, lejos de frenar mi monólogo, seguí- ¿pensaste que asfi… -recapacité y frené

Pedro: ¿qué? Terminá Paula…-me exigió levantando su cabeza y mirándome fijo con sus ojos llenos de lágrimas, yo me negué a terminar la frase y me di vuelta para sacar las milanesas que se quemaban- asfixiándote eso es lo que estoy haciendo, decilo…- sentí pena por él, por mí, por tener que estar pasando por esto, cuando una mala maniobra mía derivó que el aceite hirviendo saltara en mi mano y pegué un grito- ¿Qué te pasó?

Paula: me quemé- mostrándole mi mano que ya estaba colorada, me llevó hasta la canilla y la abrió dejando correr el agua fría en la quemadura sosteniendo suavemente mi mano, no podía dejar de temblar, me dolía, aunque parecía no ser tan grave, aun así, y dejando la discusión de lado él seguía cuidándome...

Pedro: ¡quédate acá! –lo escuché decir como si hubiese otro lugar mejor dónde estar que debajo de la canilla después de quemarme así, a los segundos volvió con una caja llena de gasas, alcohol, y otros elementos y se dedicó a curarme…

Paula: no te hacía con un botiquín en tu casa-tratando de sonar divertida… mientras lo miraba curar mi herida super concentrado...

Pedro: me lo dio Luciana, creo que no me tenía mucha fe para dejarme a los chicos…-me respondió sin sacar la atención de mi mano, mientras me colocaba una gasa con rifocina…

Paula: sonreí- ¿y lo usaste mucho? -observando el trabajo terminado de mi novio, casi no me ardía...


Pedro. No, lo estoy estrenando con vos-parándose en frente mío mirándome fijo - no llevás un día acá y ya tuve que usarlo-le volví a sonreír- está claro que es mucho más difícil cuidarte a vos que a los chicos… -y de repente la sonrisa se borró de mi rostro, él lo notó…-no lo digo reprochándotelo- se acercó para abrazarme y yo me dejé abrazar…-amo cuidarte, y sé que estuve muy pesado estos días, pero te juro que lo hago porque no me perdonaría que algo vuelva a pasarte- lo escuchaba hablar suave en mis oídos y lo abracé más fuerte totalmente sensibilizada, con el llanto presente- me siento culpable de lo que te pasó, por haberte dejado sola ese día, yo dije en LCDS que ese día tenía reunión con mis amigos, habrá visto el programa, te expuse…


Paula. ¡mi amor! ¡basta! vos no tuviste culpa de nada! –me separé para mirarlo a los ojos que brillaban llorosos- yo entiendo porque hiciste todo, no siento que me hayas asfixiado, solo que… -agaché mi cabeza tratando de encontrar las palabras, necesitaba que me entienda, que nos entendamos- no estoy acostumbrada a que alguien esté tan pendiente de mí-un nudo en mi garganta acompañado por lágrimas se hizo presente-siempre estuve sola, me manejé siempre sola, viví sola desde muy chica, no estoy acostumbrada a que vivan pendiente de mí, de cada reacción, de cada necesidad, de cada cosa que necesite…


Pedro: lo siento… no sabía que te hacía mal… -lo escuché decir desilusionado, mientras agachaba su cabeza, no había sido clara…


Paula: ¡no, no entendés! –tomé con ambas manos su rostro levantándolo para que vuelva a mirarme- soy yo la que no puede procesar tantos cambios, y esta semana fue terrible, pero si hay algo que no haces es hacerme mal –suspiré...- te amo con todo el alma y no puedo evitar sentirme culpable por hacerte preocupar tanto…


Pedro: yo te amo más…-me besó- no me pidas que no me preocupe, que no te cuide porque no sé si voy a poder dejar de hacerlo… -me dijo totalmente sincero... esta vez  fui yo la que depositó un beso sentido en sus labios…- te amo demasiado como para no estar pendiente de vos cada segundo de mi vida…

Paula: no pensaba pedirte eso...  yo también te amo demasiado…-nos besamos, él se dedicó a acariciar mi espalda, y sabía que no iba a avanzar más… ya lo había frenado muchas veces, necesitaba volver a sentir la seguridad que teníamos antes, necesitaba ser suya de nuevo.


      Quería atravesar la barrera que se había formado en esos días entre nosotros y profundicé ese beso, necesitaba transmitirle que estaba lista, que lo necesitaba… lo noté inseguro, como jamás pensé podía llegar a sentirlo conmigo y sentí la culpa nacer de adentro. ¡Basta! Ya no podía seguir así, tenía que superarlo, por mí, por él, por nosotros…

      Me dediqué a desprender los botones de la camisa que recién se había puesto mientras seguía besándolo segura de mis intenciones. Él seguía sin avanzar…



 
     Hola!!! cómo andan!!! vieron que al final se pueden solucionar las cosas, era cuestión de sacar todo afuera, de no guardarse nada!!! como dije antes a veces las peleas en las parejas son necesarias y no por eso se tienen que terminar separando, o sino todas las parejas se separarían todo el tiempo!!! 

     Bueno, ya saben que pueden dejar sus comentarios y a la que quiera que le avise cada vez que suba mi twitter es @LauyValenPyP soy Lau y gracias a todas las que dejan sus comentarios tanto acá como en twitter!!! ya saben que amo interactuar con ustedes ;)


    Les dejo el adelantito para el día sábado!!! y vamos a ver cuando se digna a nacer Oli!!! cómo se hace desear!!! no tiene idea de lo querida que es y todavía no nació :)





     Comenzamos a besarnos y sentí en sus besos la intención de ir por más, no sabía qué hacer… la sentí desprender los botones de mi camisa y me quedé paralizado por unos segundos. No quería arruinarlo todo avanzando para que luego ella vuelva a frenarme… Pero sus intenciones eran claras….

martes, 20 de agosto de 2013

Capítulo 61



Capítulo 61


Una semana después…


Cuenta Pedro…


    Ya había pasado una semana de todo lo ocurrido con Julián. Una semana terrible en la que Paula estaba totalmente susceptible, con un humor cambiante. Yo en particular no estaba mucho mejor... El hecho de que estuviera trabajando todo el día y no poder estar al cuidado de ella, me desesperaba, necesitaba saber que estaba bien, no quería dejarla sola. Hasta discutimos porque no quiso que le ponga un asistente para que la acompañe, pero tenía pánico que se vuelva a acercar a ella, la llamaba 20.000 veces por día, entre grabación y grabación, tenía la necesidad de saber que estaba bien. Por otra parte tuve que contenerme de no ir a buscarlo para darle su merecido… Paula no quiso, me lo prohibió, dijo que iba a empeorar las cosas, que alguien podía verme… a mí pero a esta altura no me importaba nada, pero tuve que aceptar antes de volver a terminar en discusión, pero ya iba a cruzármelo, esperaba ese momento ansioso...

   Todos los días fueron complicados, la paz que habíamos conseguido se disipó de un día para el otro. Me encontraba evadiendo discusiones todo el día, todo parecía ser un desencadenante de desencuentros, ni hablar en la intimidad… desde ese día no volvimos a hacer el amor, no porque no quisiéramos, pero llegado el momento Paula me frenaba. La entendía, no quería presionarla, sabía que había sido un momento de mierda y por eso en estos días ni siquiera insinué nada, cuando sea el momento, cuando ella se sienta preparada me lo hará saber, al menos eso espero… hasta llegué a dudar de que en realidad lo que me contó no haya sido así, en que tal vez si concretó lo que buscaba, pero no me animé a confesárselo, y mucho menos a preguntárselo…


   De lo único que le insistí hasta convencerla era de que se mude a mi departamento, aunque sea por un tiempo. Es mucho más seguro que el suyo, si entró una vez puede hacerlo de nuevo... Paula JAMÄS quiso hacer la denuncia y ese era otro tema del que preferí no insistir más, aunque no estuviera para nada de acuerdo... no entendía esa confianza en ella de que lo que pasó no vaya a volver a suceder... esa confianza que seguía teniendo en él después de lo que hiso... esa necesidad de ¿protegerlo? no la entendía y ya no tenía sentido que trate de entender. Convencerla de que se mude a mi departamento no  fue fácil, ella dice que yo la estoy volviendo paranóica, confía que él estaba arrepentido y que no va a volver a intentar acercarse. Pero esta vez no acepté, ya había cedido demasiado, en esto no aceptaba un no como respuesta, ya me había rechazado todos los recursos…


    Me encontraba yendo a buscarla en mi auto después de llevar algunas cosas a mi departamento. El de ella se lo había prestado a una amiga modelo, Gege. No quería deshacerse de su departamento, cosa que tampoco  entendía pero que no insistí en cuestionar… Muchas cosas, que no utilizaríamos, iban a parar en el cuarto que tengo de visitas, en el cual suelen venir a quedarse mis sobrinos, algunos amigos o mi hermano…


    Entré en el que, hasta el día de hoy, es su departamento y la encontré acomodando las últimas cosas en una caja…


Pedro: ¡volví! –la abracé por la espalda, pude notar al instante que estaba llorando y que no quería que la vea- ¿qué pasa Pau?-dejando caer mis brazos abatido, ya estaba superado…


Paula: nada gordo ¿vamos? –y otra vez la misma respuesta, otra vez me encontraba en ese abismo que ponía entre nosotros y que tanto odiaba… agarré las cajas y salí del departamento, ella cerró todo y partimos hasta el mío.


  Todo el trayecto fuimos en silencio, de esos incómodos que a uno le cuesta transcurrir. Ya era de noche, habíamos estado toda la tarde ocupándonos de la mudanza, Paula no tenía muchas cosas, era más ropa que otra cosa. La mayoría de sus muebles se los había prestado a su amiga.  Llegamos y estacioné el auto en el garaje agarré la caja y me fui al ascensor, ella seguía mis pasos, con la mirada perdida…


Cuenta Paula…


   Y acá estaba, en mi departamento guardando las últimas cosas que me quedaban. Los portarretratos que tenía, algunos adornos y también la caja que me había regalado Pedro, la abrí para ver que había guardado en ella y me encontré con muchas fotos, acá, en Europa… suspiré recordando esos días, y los días anteriores al que Julián apareció. Esta semana había sido un desastre, ya no me sentía segura en ningún lugar y Pedro no hacía más que incrementar mis miedos. Estuvo más que obsesionado ocupándose de mi seguridad, yo entendía que lo hiciera por miedo de que algo pueda pasar, pero no hacía más que volverme temerosa, necesitaba tener mi ritmo normal de vida, olvidar lo que había pasado, pero él se resistía a que sea así. Todo desembocaba en discusión y eso me tenía aun peor. Yo reconozco que estuve distante, triste, es que me cuesta asimilar lo que pasó, lo que estuvo por pasar, me sentía vulnerable, sensible, tanto que como ahora no puedo evitar que mis lágrimas empezaran a salir, justo cuando escucho la puerta abrirse y a Pedro acercarse, traté de evitar que me viese llorando, no quería preocuparlo…



   Me abrazó y aun así lo notó y otra vez sus preguntas ¿no es obvia la respuesta? Lo vi dejar caer sus brazos, señal de que estaba enojado, en silencio nos fuimos de mi departamento…



   Entramos a su casa y recién ahí volvió a hablarme…



Pedro: me voy a bañar… ya desocupé la mitad de mi placard si querés podés acomodar tu ropa, el resto podés ponerlo en el tuyo-yo asentí mientras él me hablaba sin mirarme preparándose para su baño, ya habíamos dicho que no íbamos a acomodar nada, pero tenía que sacar aunque sea la ropa.


    Entré a su habitación y empecé a acomodar la ropa en el mueble, la que era de esta estación la puse ahí y dejé el resto para guardarlo en el mío que estaba en la habitación de visitas. Tenía mi cabeza en cualquier lado, no me gustaba estar así con Pedro, no me gustaba que esta convivencia se haya dado así, pero era lo que había y me dolía, antes de volver a angustiarme me decidí a ir a preparar la cena, moría de hambre, entre la mudanza no habíamos comido nada desde el almuerzo.


   Encontré unas milanesas y me dispuse a cocinarlas, ya tenía el menú, milanesas con ensalada. Mientras las freía lo veo salir del baño y buscarme…


Pedro: ¿qué estoy oliendo? –me dijo con una sonrisa, la misma que hace días que no veía…


Paula: ¿y a vos qué te parece? –le dije mientras me volteaba y le guiñaba un ojo, lo sentí acercarse y apoyar su mentón en mi hombro…


Pedro: ¡perdón amor! –me dijo mientras lo vi rascarse la sien, yo solo me di vuelta para besarlo…


Paula: yo no tengo nada que perdonarte ¿por qué me pedís perdón? –le pregunté sincera, mientras ponía la última tanda de milanesas, ambos tuvimos una semana complicada, lo entendía…


Pedro: es que todo se dio así, me hubiera gustado que sea de otra manera –lo miré confundida- siento que vos no querés estar acá, que te obligué a que vengas a vivir conmigo… -me dijo serio, recriminándome, sentí un calor recorrerme por completo…





     Hola!!! cómo andán??? Y es así chicas!!! a veces las decisiones más importantes en una pareja no se dan de la forma en la que una hubiese soñado. Pero no por eso tiene que resultar mal!!! el proceso es lo importante!!!

    Bueno, ya saben que pueden dejar sus comentarios y la que quiera que le avise cuando suba mi twitter es @LauyValenPyP soy Lau.

    Les dejo el adelantito para el día jueves, ya sé que vengo atrasada y prometí subir ayer, pero no estuve en todo el finde en mi casa!!!  ;) Recién hoy toqué la compu! igual estaba al tanto desde el celu, en twitter obvio! por si había alguna novedad! cualquiera puede ser el día de la llegada de Oli :)



Paula: ¡no me digas que me entendés! Es mentira, nunca me entendiste, no hacés más que cuestionarme todo, no te pusiste un segundo en mi lugar solo buscaste estar vos seguro –no sabía lo que decía pero mi enojo hacía que no pudiera medir las palabras…

sábado, 17 de agosto de 2013

Capítulo 60



Capítulo 60



   …Comencé a golpear la puerta llamándola y no me contestaba. Hasta que finalmente y antes de que decidiera tirarla a los golpes la escucho abrir. El alma me volvió al cuerpo… por unos instantes en la que la veo con su ropa toda rota y sus cara inchada por el llanto…


Pedro: ¡amor! –me abrazó fuerte y comenzó a llorar… temblaba- ¿qué pasó?

Paula: ¡Julián!-me dijo con un hilo de voz, no entendía y ni podía entender, necesitaba que me contara, pero me di cuenta que apenas estaba parada. La llevé casi alzándola hasta el sillón e hice que se sentara en él. Fui hasta la cocina y busqué un vaso para servirle un poco de agua y se lo di, me agaché en frente suyo, sus manos temblaban y la ayudé a sostener el vaso. Por primera vez noté que en cara había moretones ¿por Dios que le había hecho? Sentía toda la furia dentro mío, pero necesitaba que ella hable, que me cuente, no podía más con esta intriga…

Paula: ¡gracias! –me dijo, y de a poco pude notar que trataba de calmarse, y no podía esperar…

Pedro: necesito saber qué pasó –le dije mirándola a los ojos, de los que volvieron a salir lágrimas…y después de un silencio eterno empezó su relato…

Paula: llegué a mi departamento y me estaba esperando en la escalera, me pidió unos minutos para hablar y lo dejé pasar-suspiró tomando fuerzas ¿por qué lo hiso?- empezó a decirme que no podía olvidarse de mí que no puede asimilar que este con otro…- agachó su cabeza y sentía que el corazón se me partía en mil pedazos-yo le dije que no tenía sentido seguir con eso que tenía que aceptarlo y se empezó a poner violento…-su cuerpo empezó a temblar más recordando… - le dije que se fuera pero me agarró a la fuerza y me empezó a besar, me negué y eso fue peor…- jamás sentí nacer el odio dentro mío como en ese preciso momento… noté que yo también temblaba, la abracé y siguió- me empezó a arrancar la ropa, a tocarme…

Pedro: Amor… -acaricié su espalda y besé su cabeza, ya no podía seguir escuchándola así…

Paula: quiso violarme… -dijo con la poca voz que le quedaba y empezó a descargar su angustia totalmente imposibilitada de seguir hablando, se tapó la cara con las manos. La abracé fuerte y la llené de besos, no sabía qué hacer ni qué decir, necesitaba que sepa que estaba ahí, con ella…no podía creer que ese tipo haya intentado eso, tenía ganas de matarlo- cuando ya no tenía fuerzas, cuando sentía que iba a desmayarme se levantó, me pidió perdón, me dijo que no sabía lo que estaba por hacer y se fue… ahí fue cuando te llamé y ya no recuerdo más nada solo que me despertaron los golpes en la puerta, cuando escuché que eras vos… me había desmayado…-terminó.

Pedro: tranquila amor…-suspiré, al menos no la había violado pero eso no minimizaba todo lo que le hiso a mi novia- ese HDP las va a pagar, ya mismo vamos a la comisaria a denunciarlo-me levanté decidido.

Paula: ¿qué? –me dijo sorprendida- yo no quiero hacer eso…

Pedro: ¿cómo? ¿por qué no Pau? ¡quiso violarte! Si no va a preso por lo menos tenemos que hacer que no pueda volver a acercarse a vos-no entendía, sabía que este tipo de denuncias debían hacerse rápido, no podíamos esperar, los moretones que tenía en su cara y en su cuerpo eran prueba, su ropa…

Paula: no Pedro, ya está no va a volver a hacerlo, estaba arrepentido… -¿le creía? Si no fue hoy tal vez se anime otro día…

Pedro: ¿me estás cargando Pau? ¿confías en él solo porque no se animó hoy?-le reclamé, no entendía su postura…

Paula: ¡basta Pedro! Yo no voy a ir a una comisaria –pensé que tal vez el hecho de que seamos conocido la hacía dudar.

Pedro: ¡podemos llamar a un patrullero y contarles lo que pasó!-le dije tratando de negociar…

Paula: ¿no entendés lo que te digo? ¡no quiero hacer ninguna denuncia!-la vi pararse rápido y dirigirse a su habitación, cerrando la puerta fuerte después de entrar.



   No podía entender la negativa Paula ¿qué necesidad tenía de protegerlo? De confiar en él después de todo lo que hiso… Salí al balcón, necesitaba tomar aire, saqué uno de mis cigarrillos, necesitaba pensar…

   Después de terminar de fumar el segundo empecé a reflexionar, a pensar de que no debía estar ahí sino con ella, conteniéndola, había pasado un momento terrible y tal vez solo necesitaba eso de mí, que la acompañe, sentí un nudo en el estómago por haber sido tan estúpido y guarde el paquete de cigarrillos. Me fui casi corriendo al cuarto de Pau y golpeé su puerta, no escuché nada del otro lado, seguro estaría enojada y decidí entrar…

   La vi acostada abrazando uno de los almohadones, fingía estar dormida, sabía que no lo estaba. Me senté al lado suyo, acaricié su espalda y me miró…



Pedro: amor, perdóname… yo solo quería que estés bien, que esto no vuelva a pasar- agaché mi mirada y no pude evitar que mis lágrimas salieran, la angustia de solo pensar en lo que había pasado, en lo que pudo hacerle, en lo vulnerable que estaba, el miedo de que vuelva a ocurrir…-yo me muero si te pasa algo-le confesé con un nudo en la garganta totalmente sincero, ese era el miedo más grande que un ser humano puede tener, perder a ver sufrir a los que amás…

Paula: no tengo nada que perdonarte…-me abrazó obligándome a que me siente a su lado y me llenó de besos que yo no podía responder…-te entiendo pero entendeme vos a mí, yo solo asentí y la abracé fuerte, acariciándole la espalda, poco a poco nuestros cuerpos se iban relajando- era esto lo que necesitaba, esa paz que solo vos me podés transmitir, te amo- y la besé, nos besamos…



Cuenta Paula…



    Después de aclarar las cosas con Pedro me levanté para ir a bañarme, necesitaba olvidar lo que pasó, volver a mi rutina, me metí al baño y lo escucho a mi novio decir…


Pedro: amor ¿querés comer algo?

Paula: no gordo estoy con el estómago cerrado, ahí en la mesita si querés calentá que hay una pizza…-le grité desde el otro lado de la puerta.

Pedro: no gorda, yo ya cené, te la guardo en la heladera. ¿un té, un café si aceptás? no podés estar con el estómago vacío…-y sonreí, amaba que me cuide…

Paula: un té sí.


   Me desvestí y fue cuando noté al mirarme en el espejo todos los moretones que tenía. ¿cómo podía olvidar lo que pasó así? Me sentía una idiota por haber confiado en él, por haberlo dejado pasar. En el fondo yo era culpable de todo lo que generé en él, por haberlo abandonado así como lo hice, pero tampoco justificaba que hiciera esto, y ¿si volvía a intentarlo? El miedo me estremeció y ahora entendía con más claridad las intenciones de Pedro. Pero a la vez tenía esta estúpida sensación de no querer empeorar las cosas, en dejar todo así…



    Hola!!! Cómo andán??? Yo genial!! ¿hará bien Pau en no querer hacer la denuncia? ¿cómo van a superar esto que pasó? ¿Qué hará Pedro? Muchas preguntas!!!

    Bueno, espero que les haya gustado ya saben que pueden dejar sus comentarios y la que quiera que le avise cuando suba mi twitter es @LauyValenPyP soy Lau y si no pueden dejar comentarios acá pueden dejarlos ahí también!

    Les dejo un adelanto del próximo que subiré el lunes…


   

     Ya había pasado una semana de todo lo ocurrido con Julián. Una semana terrible en la que Paula estaba totalmente susceptible, con un humor cambiante. Yo en particular no estaba mucho mejor, el hecho de que estuviera trabajando todo el día y no poder estar al cuidado de ella, me desesperaba, necesitaba saber que estaba bien, no quería dejarla sola.

jueves, 15 de agosto de 2013

Capítulo 59



Capítulo 59


   Salí del ascensor (ni ganas de ir por las escaleras, aunque sean solo 3 pisos) y me detuve en frente a mi puerta para buscar las llaves en mi bolso. Puse las llaves en la cerradura totalmente distraída, no noté que alguien estaba sentado en las escaleras, lo veo acercarse y me asusté…


   En un primer momento me costó reconocerlo, estaba mucho más flaco que la última vez que lo vi. También lo vi algo demacrado y no solía verlo vestido de informal.


Julián: ¡hola Paula! Te estaba esperando… -me dijo mientras se paraba enfrente, yo todavía estaba con mis manos en la puerta, sin abrirla y la dejé así para voltearme y escucharlo, si venía a decirme algo mi intención es que sea rápido, el pasillo estaba bien para eso…

Paula: sí, ya veo… ¿qué necesitás? –le dije seca, si había alguien que no tenía ganas de ver, él se llevaba todos los números, no lo odiaba, pero lamentaba que no podamos haber terminado de otra manera, nos quisimos mucho, podría haber sido de otra forma… reflexioné que tal vez a eso venía, a tratar de terminar civilizadamente…

Julián: yo… necesitaba hablar con vos…-me dijo mirando la puerta ¿tenía la intención de que lo dejase pasar? – solo unos minutos, por favor… -lo notaba triste y si queríamos ser civilizados no veía mal que lo deje pasar, sin decir nada, abrí la puerta y le hice señas de que pase, así lo hiso, pasó por enfrente mío y yo cerré la puerta tras entrar.

Paula: te escucho –le dije mientras dejaba mi bolso y la pizza en la mesita al lado de la puerta de entrada, nos sentábamos en los sillones de mi living… uno frente al otro…

Julián: no sé por dónde empezar… -lo vi agachar su cabeza, no entendía nada…- no hay día en el que no me levante pensando en vos, que no viva pensando en vos… no lo puedo asimilar… no puedo asimilar que ames a otro…-me dijo sin filtro…

Paula: ¿en serio venís con el mismo planteo? Yo fui clara con vos… sincera…-lo interrumpí…me dolía su declaración de amor, no quería lastimarlo pero no iba a confundirlo llenándolo de esperanzas que no existen, tenía que ser justa…

Julián: ¡para mí no es fácil olvidarte como si lo fue para vos! –me reclamó levantando la voz y mirándome con los ojos llenos de lágrimas- te amo igual que siempre y no lo puedo cambiar…

Paula: ¡es que tenés que hacerlo! Ya no tiene sentido que me digas esto, ¡se acabó Julián!-totalmente alterada y arrepentida de haberlo dejado entrar me paré de mi asiento y él hiso lo mismo, acercándose a mí- ¿qué hacés? ¡andate! –vi sus intenciones, se acercó abrazándome por la fuerza- ¡soltame! –le rogué…

Julián: ¿no nos merecíamos despedirnos de otra manera?-no podía creer lo que estaba pasando, no podía hacer que me suelte y me tomó con una de sus manos mi nuca para besarme forzadamente…sentí el contacto con sus labios y me separé lo más rápido que pude, pero aun no podía soltarme de sus brazos, me tenía inmovilizada…

Paula: ¡basta Julián! Soltame por favor… ¿no te das cuenta que esto así no sirve? –mis lágrimas empezaron a brotar junto con su furia por el rechazo y me empujó al sillón en el que antes estaba sentada… sentía pánico, no podía dejar de temblar ¿qué quería hacer? No podía reaccionar solo llorar y pedirle mil veces que se vaya…

Julián: no me voy a ir… si no es por las buenas tendrá que ser por las malas… -y ya entendía lo que no quería entender… forcejeó conmigo, sentía sus manos tocarme mientras arrancaba a tirones mi camisa, empecé a pedir ayuda a los gritos y me amenazó diciéndome que seguía gritando Pedro lo iba a lamentar. ¿cómo puede ser tan cínico? Quedé paralizada con el solo hecho de pensar que podría hacerle algo a él… Me tapó la boca con una de sus manos mientras con la otra levantaba mi pollera… no podía dejar de temblar, sentía que iba a desmayarme, este no era el Julián que conocí, era otro… sentí que se empezaba a bajar el cierre desprendiendo su pantalón y se vio obligado a sacar su mano de mi boca…

Paula: Julián-le dije con un hilo de voz- por favor no lo hagas… -y cerré mis ojos… ya estaba cansada de forcejear, en ningún momento había dejado de hacerlo, pero sentía que mis fuerzas me abandonaban, ya no podía hacer nada más…

Julián: perdón –lo escuché decir, y sentí que el mundo se me caía encima noté mis manos temblorosas libres y me tapé la cara para llorar desesperadamente esperando que se haga su voluntad… de repente siento que se levanta de encima mío y me destapé para verlo, se estaba vistiendo… - perdóname, te juro que no quería lastimarte-me dijo llorando, ¿se había arrepentido de lo que estaba por hacer?…

Paula: ¿qué querías hacer Julián? –le dije tratando de taparme con los harapos que quedaban de mi ropa, sin dejar de llorar…

Julián: ¡no sé Pau! Sentirte mía por última vez… perdóname, por favor…-me dijo agachando su cabeza y saliendo de mi departamento, aquel en que nunca debí dejarlo entrar… me paré con las pocas fuerzas que tenía, mis piernas no dejaban de temblar y cerré la puerta con llave, busqué mi bolso, y saqué el teléfono que estaba en su interior… marqué su número…


Cuenta Pedro…


    Ya había perdido la noción de cuanto había tomado, no sabía si había sido mucho o me había desacostumbrado al ritmo de mis amigos y eso que recién hacía un par de horas que estaba ahí. Necesitaba tomar aire, el olor a alcohol y a cigarrillo del living donde estábamos jugando ya me asfixiaba. Miré mi celular, seguro que Paula ya había llegado a su casa, tenía sesión de fotos hasta tarde y no pude evitar sonreír al ver que me estaba llamando…



Pedro: ¡amor! ¡justo estaba pensando en vos! –le dije sincero…

Paula: ¡amor! –la escuché llorando y sentí una puntada en el pecho- ¡por favor vení! –me rogó

Pedro: amor ¿Qué pasa? ¿por qué llorás? –escuché un silencio del otro lado, volví a llamarla y daba ocupado y sin dudarlo dos veces me despedí de mis amigos, Hernán se acercó a abrirme la puerta ante la atenta y confusa mirada del resto.

Hernán: ¿qué pasó Pepe? –me preguntó preocupado.

Pedro: algo le pasó a Paula, me llamó llorando pidiéndome que vaya y después no me dijo más nada, intenté volver a llamarla pero me da ocupado-le dije a mi amigo asustado…

Hernán: andá tranquilo, ¿está en su departamento? ¿querés que te acompañe?

Pedro: creo que sí, eso espero, ni eso me dijo. No, gracias pero prefiero ir solo. Me voy- y me despedí de mi amigo…



   El trayecto corto hacía el departamento de Paula se hiso eterno. Estacioné en frente del edificio y subí los pisos corriendo, llegué en frente a su puerta y busqué mis llaves, intenté abrir pero las de ella estaban puestas en la cerradura. Comencé a golpear la puerta llamándola y no me contestaba. Hasta que finalmente y antes de que decidiera tirarla a los golpes la escucho abrir. El alma me volvió al cuerpo… por unos instantes en la que la veo con su ropa toda rota y sus cara inchada por el llanto…



Pedro: ¡amor! –me abrazó fuerte y comenzó a llorar, temblaba- ¿qué pasó?




     Hola!!! Cómo andan??? Ya sé! no se esperaban esto ¿no?  No me odien!!! Un poco de acción no viene mal, estaba muy buena estos días!!! Igual no piensen que lo escribí porque fue un  arrebato de un mal día, para nada, desde que iba por la mitad de la novela sabía que esto iba a pasar, ¿va a tener sus consecuencias? Obvio!!! Pero no se asusten, hay cosas que se solucionan de a dos ;)
    Ya saben que pueden dejar sus comentarios (siempre con respeto) acá en el blog y si quieren que le avise cada vez que suba  twitter es @LauyValenPyP soy Lau, también pueden dejar sus comentarios ahí la que no pueda hacerlo acá ;)

    Hoy sí les dejo un adelantito del próximo. Se habrán dado cuenta por qué no deje en el anterior! no podía encontrar un párrafo que no delate lo que se venía!!!… lo subiré el sábado!!!
    


Pedro: Amor… -acaricié su espalda y besé su cabeza, ya no podía seguir escuchándola así…

Paula: quiso violarme… -dijo con la poca voz que le quedaba y empezó a descargar su angustia totalmente imposibilitada de seguir hablando, se tapó la cara con las manos. La abracé fuerte y la llené de besos, no sabía qué hacer ni qué decir, necesitaba que sepa que estaba ahí, con ella…



martes, 13 de agosto de 2013

Capítulo 58



Capítulo 58


3 semanas después


Cuenta Pedro…


    Semana terrible, fue la primera semana de grabación. Todavía no podía acostumbrarme al ritmo de la productora. Tenía que levantarme muy temprano para poder llegar al set, que por suerte, no quedaba lejos. Trataba de memorizar los libretos (en eso confieso que Paula me ayudó bastante, nunca fui bueno estudiando), por suerte mis compañeros eran geniales, y habíamos pegado buena onda desde el primer minuto. Casi no nos conocíamos pero estaba seguro que íbamos a congeniar, en definitiva el secreto de una comedia es transmitir la buena onda y el humor, y tanto con Gustavo, como con Adrián y Federico eso estaba asegurado.

   Grabábamos de lunes a viernes y el horario se extendía hasta las 6 o 7 de la tarde, Pau ya había comenzado con los ensayos que la tenían demolida, lo sabía, las primeras semanas eran así. Yo a pesar de mi cansancio trataba de relajarla y quitarle tensión, ella hacía lo mismo conmigo. Estábamos más unidos que nunca, tratando de disfrutar cada segundo solos como si fuese el último. 

   
   En estos días, a pesar de ser intensos no tuvimos ningún cruce, ninguna discusión. En su casa o en la mía, dormíamos todas las noches juntos, necesitábamos que sea así… Tanto que hoy sábado me costó horrores aceptar la insistente invitación de mis amigos para reunirnos en nuestro mítico torneo de play, del cual andaba bastante ausente, y del que casi me vi obligado a aceptar. Por suerte se había arreglado en lo de Hernán así que estaría cerca y pude negociar con mi novia  que después iría a dormir a su casa, después de un largo día en el canal (ya que obviamente seguía también con  LCDS) y de extrañarla mucho. Obviamente yo también era dueño de un juego de llaves de su departamento, así que sin poner horario de llegada acordamos que en cuanto termine y sin importar el estado en el que esté... dormiríamos juntos…



Cuenta Paula…


   Día eterno. No podía estar más cansada. Los ensayos me estaban matando, y mi cuerpo todavía no se acostumbraba. Me arrepentí de no haber ido antes al gimnasio por lo menos, estaba totalmente fuera de estado. Esta semana ya habían hecho la prueba de vestuario y maquillaje en IDS. Tuve que acomodar mí agenda, tanto que hoy sábado (día que hubiese preferido sea de descanso) me encontró en un set de fotos para una campaña toda la tarde. No veía la hora de llegar a mi casa y descansar. Hoy Pedro tenía reunión en la casa de Hernán, torneo de Play, no nos veríamos hasta la madrugada en que vendría a mi casa…


    Ya de noche, ya que tardamos más de lo que hubiese deseado y entre el viaje, regresé. Antes de llegar a mi casa pasé por la pizzería, mi plan ya estaba listo. Pizza, cama, película. No había otro, Zaira me había rebotado la invitación ya que andaba viéndose con un chico, cosa que me alegraba muchísimo por ella, ¡era hora de que mi amiga encuentre a alguien! solo que ese chico no me daba buena espina. No había oído hablar bien de él. Solo esperaba que no la lastime, no se lo merecía…


   Entré a mi edificio suspirando, el solo hecho de saber que Pedro no vendría hasta tarde me hacía extrañarlo aún más ¿desde cúando me hice tan dependiente? Creo que era una pregunta que me hacía a menudo y la respuesta era más que obvia. Desde que me enamoré perdidamente, desde que sentía esta necesidad de tenerlo cerca, de oír su voz, de sentir sus labios, su cuerpo… De compartir nuestras camas. Porque no importaba el lugar, si era en la de él o en la mía, teníamos que dormir juntos. Hace una semana tuve un desfile y tuve que viajar. Esa noche no pude dormir, él tampoco y estuvimos chateando hasta cualquier hora ¿es normal? Pensaba. Pero es el mejor de los estados, el que me hacía feliz…


   Salí del ascensor (ni ganas de ir por las escaleras, aunque sean solo 3 pisos) y me detuve en frente a mi puerta para buscar las llaves en mi bolso. Puse las llaves en la cerradura totalmente distraída, no noté que alguien estaba sentado en las escaleras, lo veo acercarse y me asusté…


  En un primer momento me costó reconocerlo, estaba mucho más flaco que la última vez que lo vi. También lo vi algo demacrado y no solía verlo vestido informal.




    Hola!!! Cómo andan??? Quién será, no? No voy a adelantar nada y no me pregunten tampoco, please!!! Solo les voy a decir que los siguientes capítulos son imperdibles, de muchos cambios ;) tanto así que a pesar de tenerlos escrito no les puedo dejar adelanto, al menos del siguiente que lo subiré el jueves!!!



   Ya saben que pueden dejar sus comentarios y a la que quiera que le avise cada vez que suba mi twitter es @LauyValenPyP soy Lau. Muchos Besos!!!

sábado, 10 de agosto de 2013

Capítulo 57



Capítulo 57


Cuenta Pedro...



    Después de un rato estaban preparando todo para tomar mate en el quincho, decidí ir a buscar a Pau y a Delfi. Apenas entré al cuarto noté a Paula llorando con Delfi durmiendo en su regazo y no entendía nada… me acerqué a ella que trataba de disimular su llanto…


Pedro: amor ¿qué pasa? ¿por qué llorás? –le pregunté en voz baja mientras me sentaba al lado suyo en la cama y la abrazaba por el costado, quería saber, me sentía culpable, tal vez la dejé demasiado sola…

Paula: nada amor –mientras me acariciaba suavemente la cara y me daba un beso... sí lo que quería era desviar mi atención no lo lograría, no le creía…

Pedro: ¿por nada estás llorando Pau? Decime por favor…-le supliqué, no le dejé opción, suspiró y la escuché atento.

Paula: es que… me emocionó mucho Delfi… es tan dulce… -daba fe de eso, pero seguía sin entender- verla así dormida con esa sonrisa, tan feliz, tan llena de paz... - volvió a tomar aire y sus ojos volvieron a llenarse de lágrimas- yo tenía su edad cuando un día desperté con la noticia de que habían muerto mis papas –y terminé de entender su angustia… la abracé aún más fuerte y siguió-desde ese día, que jamás voy a olvidar, ya no recuerdo que haya podido volver a dormir con esa paz que tenía-la vi bajar la mirada, triste- no había noche en la que no durmiera en medio del llanto y a las mañana solo rogaba que todo haya sido una pesadilla…-volvió a tomar aire…- pero no, me despertaba en un cuarto que no era el mío, en una casa que no era la mía y sabía que no iba a venir mi papá a despertarme con besos y cosquillas para ir al colegio y que en la cocina no iba a estar mi mamá esperándonos con el desayuno-secó sus lágrimas con enojo- hasta llegué a odiarlos con tan solo 7 años por no haberme cumplido su promesa, la de volver lo antes posible.

Pedro: amor ellos no quisieron fallarte… traté de calmar su angustia…

Paula: ahora lo entiendo ¿pero a esa edad? No lo entendía, hasta había veces en que hubiese preferido haberme ido con ellos-la escuché decir con dolor, totalmente sincera- que me hubieran llevado- y su llanto se hiso ya inevitable, de sus ojos no dejaban de salir lágrimas descontroladas… yo simplemente la abracé fuerte y la llené de besos esperando que pudiese sanar, aunque sea un poco, tanto dolor…


     Paula había abierto una puerta que mantuvo cerrada hasta ahora conmigo, nunca hablaba en profundidad de sus padres, y cuando lo hacía buscaba esquivar el tema de inmediato, cosa que yo entendía y respetaba. La herida de la ausencia de sus padres era muy grande, hasta ahora, en la adultez, la marcaron profundamente. Hoy cuando me miraba cuando llegaron mis sobrinos pude notarla conmovida y entendí que la familia era algo que la volvía visiblemente vulnerable. La sentí calmarse de a poco…


Paula: ¡pobre Delfi! Espero que no haya escuchado nada-me dijo mientras se reponía sentándose y me miraba con sus ojos más verdes que nunca…

Pedro: ¡quedate tranquila! Sacó los genes Alfonso, ni un terremoto la despierta- y la vi sonreír de nuevo y yo la besé…- te amo hermosa…

Paula: yo te amo más… -y nos fundimos en un abrazo en donde quería transmitirle todo mi apoyo, hacerle entender que ya nunca va a estar sola... que va mucho más allá de lo físico, de lo mental… necesitaba transmitirle que me entregaba a ella, en todo lo que soy, solo para hacerla feliz, y esa iba a ser mi meta en esta vida… su felicidad, esa que perdió desde tan chica y con la que nunca se animó a soñar…


Cuenta Paula…


3 semanas después…


    Otro día agitado me esperaba… las últimas semanas fueron terribles. Mi agenda laboral estaba más que cargada. Desde que firmé el contrato para el bailando no dejaron de llegarme propuestas, las que junto a mis representantes y a Pedro, analizábamos punto por punto.

    Esta semana habíamos pautado hacer una nota con la revista Gente, de la cual seríamos la tapa. Nos dirigimos junto a mi novio al hotel Sofitel de la Reserva los Cardales en donde haríamos la producción de fotos, algunas bastantes jugadas ya que habíamos pautado hacerlas con el torso desnudo, obviamente que tapándonos, al menos Pedro a mí. Confiábamos en el trabajo del fotógrafo, al menos sabíamos que era uno de los mejores. Después haríamos fotos en los distintos sectores del hotel, ya que además contaba con un parque soñado. 

   El lugar perfecto, el clima era ideal, ya eran los últimos días de calor en pleno otoño, mediados de abril. Mientras hacíamos las fotos lo notaba a mi novio tenso, era obvio, no estaba acostumbrado a hacer poses y me mataba de amor, traté de relajarlo y que se sienta más cómodo, no faltaron los mimos en el medio de la sesión. A veces hasta nos olvidábamos que había un montón de gente viéndonos. Terminamos con las fotos que quedaron lindísimas y nos despedimos del equipo para luego encontrarnos con quién iba a ser nuestro periodista. Habíamos decidido hacer la nota después que insistieran bastante pero finalmente aceptamos con nuestras condiciones. Nosotros sabíamos qué contar, y qué no, de nuestra relación y queríamos respetarlo.

     Pablo, el periodista y editor de la revista, era el  encargado de hacernos la nota, era conocido de Pedro de antes y eso hiso todo más distendido. Contamos un poco de nuestra historia, no mucho más de lo que ya todos sabían, de nuestra semi-convivencia, de nuestros caracteres y humores, de nuestras propuestas laborales. Pedro ya había firmado con Polka para ser uno de los protagonistas de la nueva comedia que empezarían a grabar dentro de 2 semanas, yo desde la semana que viene empezaría con los ensayos para el bailando. Ambos ciclos empezarían a mediados o fines de mayo. La nota fue amena y nos distendimos bastante. Una vez conformes la dimos por terminada. Pedro y yo vimos partir al equipo de la revista mientras que nosotros decidimos pasar la noche ahí…

    Nos dirigimos a la habitación que habíamos reservado, la suite 304 con una vista romántica al bosque, en la cual habíamos sacado fotos más jugadas y nos relajamos, necesitábamos un día de descanso después de tanta vorágine…

    El servicio a la habitación llegó y decidimos llevar todo y comer en la cama, amaba estar así con Pedro, estos días fueron intensos, casi no teníamos tiempo de disfrutar de estas pequeñas cosas por estar corriendo todo el día, y como era de esperar, pareció leer mi mente…


Pedro: ¡no sabés lo que necesitaba que estemos así! Mientras dejaba la bandeja ya vacía al costado de la cama sobre el carrito del hotel donde nos habían traído la cena y me daba un dulce beso en mis labios…

Paula: y yo amor… justo estaba pensando en que extrañaba estar así, relajados, tranquilos…-mientras me acomodaba más cerca suyo, abrazándolo- sin pensar que tenemos que salir corriendo a cumplir con nuestras obligaciones…

Pedro: sí, fue una buena idea –me dijo seguro y yo no lo estaba tanto…

Paula: mmmm

Pedro: me sonó raro ese mmm ¿qué pasa Pau? –él notó mi inseguridad.

Paula: nada amor, solo que me da miedo de que exponernos así nos haga mal…

Pedro: pero ¿qué dijimos de malo que nos pueda afectar? –mientras me miraba fijo, tenía razón, no habíamos dicho nada de otro mundo pero el solo hecho de contar era la cuestión…

Paula: nada, pero siento como que estamos abriéndolo las puertas para que cualquiera opine o juzgue y… no es que me importe lo que digan los demás, ¡más de lo que han dicho!

Pedro: si decían es porque no sabían, porque nosotros no lo blanqueábamos, pero ahora ya nadie va a hablar cosas que no son… -claramente su teoría era otra- yo no creo que tengamos que ocultar lo que nos pasa si es real y puro o ¿no?

Paula: ¡obvio amor! Pero hasta acá, no creo que esté bueno que vivan nuestra historia como propia…

Pedro: eso está más que claro ¿Cuándo metimos a alguien en el medio? Aunque es inevitable que el resto lo viva como una novela pero acá nosotros dos somos los que tenemos que tenerlo claro.


     Asentí con besos las palabras de mi novio, en definitiva él conocía el medio mucho más que yo, sabía tomar las decisiones más acertadas y criteriosas, era mucho más tranquilo y relajado, sería incapaz de hacer algo que nos afecte, confiaba en eso, confiaba en él…


    Traté de relajarme, cosa que no fue difícil al sentir el contacto de su piel con la mía. Sus besos hacían desaparecer cualquier miedo, me transportaban a ese mundo que solo él lograba llevarme, solo él sabía el camino. Ese que transitábamos llevados por la pasión desenfrenada e inevitable que nos perdía… para encontrarnos en ese mundo, lleno de placer y locura.

    Sus manos, recorriéndome por completo, escuchar su respiración agitada mezclada con la mía, el aroma de su cuerpo, su cuerpo, su mirada, sus besos… todo él ocupaban todos mis sentidos y los fundía, toda mi atención era solamente suya, yo era solamente suya…



    Hola!!! cómo andan??? ya votaron ??? yo sí... aunque las opciones no me convencían en absoluto :/
    Espero que les haya gustado el capítulo! en especial la primera parte. Era necesario para mí escribir sobre los sentimientos guardados de Paula con respecto a sus padres y por qué no dejarla abrir esa ventana a partir de Delfi que tiene la misma edad en la que ella los perdió! a mi me gustó espero que a ustedes también! otro tema! cada vez más populares!!! cada vez más cerca el certamen y las grabaciones!!! qué será de ellos!!!
    Ya saben que pueden dejar sus comentarios y la que quiera que le avise cada vez que suba mi twitter es @LauyValenPyP soy Lau y les dejo el adelanto para el día martes!!!

    


    Grabábamos de lunes a viernes y el horario se extendía hasta las 6 o 7 de la tarde, Pau ya había comenzado con los ensayos que la tenían demolida, lo sabía, las primeras semanas eran así. Yo a pesar de mi cansancio trataba de relajarla y quitarle tensión, ella hacía lo mismo conmigo. Estábamos más unidos que nunca, tratando de disfrutar cada segundo solos como si fuese el último. 

viernes, 9 de agosto de 2013

Capítulo 56



Capítulo 56


Cuenta Pedro…


   Después de casi una hora y media de viaje, llegamos parecíamos haber llegado a destino… una vez que lo vi frenar el auto miré la casa sorprendida…



Paula: ¿es acá?-le pregunté incrédula…

Pedro: sí, es acá-mientras giraba para mirarla divertido- ¿te gusta?


   Era una casa enorme, preciosa, con un parque eterno en el fondo, con árboles y una piscina gigante.


Paula: es hermosa tu casa Pedro, nunca me contaste que era tan grande- mientras seguíamos observando la casa aun en el auto…


Pedro: me encanta que te guste-me di vuelta para depositar un beso en sus labios.


   En ese momento se abrió el portón para poder entrar el auto e ingresamos. Vi salir al padre y a dos hermanas de Pedro y a su hermano (los reconocí al instante por las fotos y los videos que habíamos visto.

  Bajamos del vehículo y me dieron una cálida bienvenida. Me sentía super relajada, Carolina y Sonia me llevaron hasta la cocina que era donde estaban con los preparativos del almuerzo mientras que Pedro se fue con su papa y su hermano Federico afuera a prender el fuego para el asado. Antes de dejarme con sus hermanas mi novio se acerca y me dice en voz baja alejándome un poco de sus hermanas…



Pedro: ¿estás bien amor? –y la verdad era que me sentía increíblemente bien, extrañaba el ambiente familiar, la familia unida…

Paula: ¡obvio amor! Andá tranquilo, yo me quedo a ayudar a tus hermanas.-él sonrío y me dio un beso antes de irse.



   Conversamos con Sonia y Caro sin parar, ellas contándome anécdotas y cosas de la familia, también preguntándome sobre mí, siempre respetuosas. Debe ser algún gen de la familia, todos transmitían la misma paz, seguridad y confianza como mi novio, como recordaba de Ana. Les conté a ellas que la conocía y se miraron sorprendidas, emocionadas… justo en ese momento llegó Luciana con su familia. Salimos de la cocina para recibirlos, todos, en el patio junto con el resto de los integrantes.

  Delfi (7) y Fran (5) fueron corriendo hacia los brazos de Pedro quién los alzó y los llenó de besos. Al ver la foto miles de mariposas volaron en mi cabeza y me resultó inevitable pensarlo como padre… imaginármelo me bloqueó por completo tanto que no reaccioné que venían hacía mí. Claramente querían que me presente y yo que estaba visiblemente emocionada busqué la mirada de mi novio que me miraba asustado.



Pedro: Pau ¿qué pasa? –me repuse enseguida y le dediqué una sonrisa sincera, ya habría tiempo de explicar… ahora lo importante eran los chicos que me miraban confundidos…

Paula: ¡estoy bien amor! –y me agaché a la altura de los pequeños- ¿y estos chicos tan lindos?

Delfi: yo soy Delfina –primereó la mayor, con una sonrisa enorme.

Fran: yo soy Fran, vos sos la novia de mi tío, ¿no? Te vi en la tele… -y todos se rieron ante el comentario…


Cuenta Pedro…


   Todo transcurría mejor de lo que me hubiese imaginado. La veía interactuar a Paula con mi familia como si se conocieran de años. En el fondo sabía que iba a ser así, pero no pensé que tan rápido… No podía dejar de verla sorprendido, más de una vez tuve que soportar las cargadas de mis hermanos o de mi padre al notarme totalmente pendiente de mi novia.


   A la tarde después del almuerzo tuvimos que aceptar el pedido insistente de mis sobrinos que nos pedían jugar con ellos. Mientras el resto de la familia se dedicaba a tomar sol o estar en la pileta, nosotros (Pau y yo) salimos de la misma para estar con ellos, que ya estaban cansados de estar en el agua. Y la misma pelea de siempre entre ellos, que no se decidían qué jugar. Hasta que por sorteo tocó que juguemos al futbol. Entre los 4 hicimos un picadito, los chicos estaban enloquecidos con mi novia que corría a la par de ellos. No podía evitar imaginármela como madre, la veía plena, feliz… ¿cómo una persona puede generar tantos sentimientos dentro de uno sin ni siquiera proponérselo?

  Después de largo rato Delfi empezó a reclamar que a ella siempre la hacíamos jugar juegos de varones, a lo que Paula reaccionó…


Paula: si querés nosotras podemos jugar con las muñecas que trajiste –una sonrisa enorme iluminó el rostro de mi sobrina…

Delfi: ¡sí! Por favor –se quedó pensando- pero tenemos que ir adentro porque la última vez que vine uno de los perros del abuelo me comió una muñeca…

Pedro: pueden ir a mi cuarto si quieren, ahí está fresquito y pueden jugar tranquilas…-le sonreí a Pau que asintió feliz…


Cuenta Paula…


   Pedro nos acompañó a Delfi y a mí hasta el que era antes su cuarto. La ayudé a Delfi a subir sus muñecas, ya que eran varias y el ex cuarto de mi novio estaba en el primer piso. Nos dejó solas y dejamos caer todas las muñecas sobre la cama. Empezamos a jugar y luego de largo empezó una especie de interrogatorio…


Delfi: ¿vos y mi tío se van a casar? –me preguntó de una sin anestesia…

Paula: por ahora no Delfi, es muy pronto, hace poquito que somos novios con tu tío –sonreí al ver que mi respuesta no la conformaba del todo- lo querés mucho a tu tío ¿no?

Delfi: muchísimo. Es el mejor tío de todo el mundo-me dijo sincera- ¿y vos? –me increpó.

Paula: yo también, lo amo mucho –y ya las muñecas habían quedado de lado, nuestra atención estaba enfocada solo en nuestra charla, ella que antes estaba sentada se acostó en la cama boca abajo y apoyo su mentón en sus manos, observándome atenta como si esperase que dijera un discurso…

Delfi: él es feliz con vos-me dijo relajada- antes mi tío siempre tenía la mirada triste y desde que está con vos lo veo distinto –y yo no pude evitar sentirme emocionada ante la observación de Delfi.

Paula: ¿te puedo confesar algo? Pero no se lo digas a nadie –mientras ella me observaba divertida y yo copiaba su posición.- a mí tu tío me hace la mujer más feliz del mundo –y ella sonrió conforme y me abrazó sin aviso…

Delfi: ¡Gracias! ¿te puedo decir tía? –me preguntó tímida después de su arrebato de cariño, que tanto amé.

Paula: ¡obvio! ¡Me encanta! –y ahora fui yo la que la abrazó y de a poco se fue quedando dormida en mi regazo, tranquila, en paz…


Cuenta Pedro…


  Después de un rato estaban preparando todo para tomar mate en el quincho, decidí ir a buscar a Pau y a Delfi. Apenas entré al cuarto noté a Paula llorando con Delfi durmiendo en su regazo y no entendía nada…



  Hola! Cómo andan? Acá les dejo el capítulo de hoy ¿por qué llora Pau? En el próximo lo sabrán. Tranquilas! Relajen!!! Ya saben que pueden dejar sus comentarios y a la que quiera que le avise cada vez que suba mi twitter es @LauyValenPyP soy Lau y el próximo capítulo lo subo el domingo en algún horario ;) ya que no sé en qué horario iré a votar!!! Besos y les dejo el adelanto del siguiente capítulo!



Pedro: amor ¿qué pasa? ¿por qué llorás? –le pregunté en voz baja mientras me sentaba al lado suyo en la cama y la abrazaba por el costado, quería saber, me sentía culpable, tal vez la dejé demasiado sola…

Paula: nada amor –mientras me acariciaba suavemente la cara y me daba un beso, no le creía…

Pedro: ¿por nada estás llorando Pau? Decime por favor…-le supliqué, no le dejé opción, suspiró y la escuché atento.